Guinea-Bissau está rodeada al
norte por Senegal, al sur y al este por Guinea y al oeste por el océano
Atlántico. Es un país pequeño por su tamaño, pero es el país de todos los
superlativos : la capital más bonita de África del Oeste, con sus calles
tranquilas de arquitectura colonial, el archipiélago de los Bijagos, el
conjunto de islas más lindo de África; el país más acogedor, con un pueblo que
sabe divertirse y que sabe recibir. Los que conocen Guinea-Bissau no dejan de
halagar esta tierra de misterios y de tradiciones.
Es
un país forestal y por eso, numerosas comunidades étnicas viven ahí desde hace
siglos y disfrutan de sus recursos silvestres. Algunas están instaladas sólo
desde el principio del siglo XX, algunas sólo cuentan con unos cien miembros,
otras están presentes en varios países de África del Oeste. Entonces,
Guinea-Bissau es un país muy rico desde el punto de vista de la diversidad, de
las tradiciones y de la cultura.
Más
de unas veinte etnias conviven en total. El país está profundamente orgulloso y
apegado a sus tradiciones. La manera de vestir y el entorno tradicional
determinan la pertenencia a una cultura, a un clan. Cualquier guineano puede
decir de qué comunidad es su compatriota vestido de traje tradicional frente a
él. Un empresario que trabaja en Bissau o un profesor que trabaja en Catio
llevarán el traje de ceremonia cuando vuelvan a su pueblo durante las
vacaciones o vestirán el traje tradicional en las fiestas y eventos religiosos.
El
folclore guineano siempre fue un medio de educación y de iniciación a los
jóvenes, para un buen comportamiento en sociedad. Para ello fue
creado el 12 de noviembre de 2000 el conjunto folklórico nacional “Netos de
Bandim”. Desde entonces, el grupo recorre África, pero también en Europa.
Presenta
un folklore muy rico y variado, compuesto de varias danzas rítmicas sobre todo
el “Soli”, el “Yankady”, el “Manè”, el « Doundoumba », el
« Kebendo », el « Zaillé » o el « Toupou Cècè ».
Guinea-Bissau
no es solamente el país de la música, es también el país de las danzas. Cada
comunidad, cada categoría de edad tiene sus danzas tradicionales, además de los
movimientos de caderas más modernos de los ritmos de otras tierras de habla
portugués. El conjunto folklórico nacional “Netos de Bandim” presenta danzas
movidas como “Brosca”, “Koussondé” o las danzas tradicionales “Cabaro” para los
hombres, o “Campouni” para las mujeres.
Este ballet nos invita a
descubrir una tierra de todas las aventuras. El pueblo de Guinea-Bissau,
de múltiples religiones, costumbres y tradiciones, forma una unidad cultural
natural que habla el “crioulo”, lengua que se basa sobre un portugués adaptado
y simplificado. Los guineanos comparten su alegría de manera exuberante durante
los carnavales.
“Netos de Bandim” les permitirá
comprobar su alegría y su fuerza.